Colocar vinilos autoadhesivos en la cocina es un ahorro
El inversor y experto en reformas Alejandro Ortiz de El Excel de Alex, nos cuenta en qué podemos ahorrar para que una reforma de cocina nos salga al mejor precio
Hay un punto en toda vida de una cocina en la que nos replanteamos darle un buen lavado de cara. Pero, si hay algo importante antes de dar el paso es saber hacerlo con cabeza. Cuál es nuestro presupuesto y qué tipo de reforma queremos son dos preguntas que guían el antes y el después del proceso.

Alejandro Ortiz de El excel de Alex es un inversor experto en reformas y construcción que comparte en su canal de Youtube consejos para conseguir las estancias que siempre hemos deseado tener, al mejor precio. El especialista publicó un vídeo donde explicaba detalladamente dónde podemos ahorrar en una reforma de cocina.

“La cocina se ha convertido en una de las estancias más valoradas dentro de una vivienda, tanto por propietarios como por inquilinos”, cuenta en su perfil. “Existen múltiples niveles de intervención, desde un simple lavado de cara hasta una reforma integral, pasando por un punto intermedio que el autor denomina ‘reforma de tripas’”, explica.
Saber qué tipo de reforma necesitamos
Para Alejandro hay una cuestión clave antes de plantearnos nada: ¿es necesaria una reforma integral o es posible optar por soluciones intermedias y más económicas? “Existe una analogía culinaria que lo ilustra: una receta sencilla con ingredientes baratos puede resultar deliciosa, al igual que una reforma bien pensada no necesita grandes lujos para ser efectiva”, explica.
Y es que para el especialista una forma efectiva para saber qué tipo de renovación necesitamos (integral o como él mismo dice, de tripas) es comprobar los cimientos de la cocina. Con estos se refiere a la fontanería, electricidad y alicatado.
“Las tuberías deben evitar materiales obsoletos como el plomo o el hierro; El cableado eléctrico ha de contar con el grosor adecuado para soportar altas cargas, debidamente protegido; y, finalmente, en cuanto al alicatado, es importante verificar que no existan piezas abombadas ni sonidos huecos al golpearlas, lo que indicaría una mala colocación y un alto riesgo de rotura”, desvela Alejandro en su vídeo.
Para él, si estos tres aspectos están en buen estado, nos será posible hacer solo un lavado de cara sin necesidad de obras mayores.

Cómo hacer una ‘reforma de tripas’
Este tipo de reformas se basan en aplicar distintas estrategias que permiten modernizar la cocina sin necesidad de realizar una gran inversión. Un ejemplo de ello es pintar sobre los azulejos existentes, instalar suelo vinílico autoadhesivo, substituir luminarias o grifos y cambiar las encimeras para actualizarlas.
“La reforma de tripas consiste en renovar las instalaciones internas —fontanería, desagües y electricidad— sin necesidad de alicatar toda la cocina. Generalmente, las conducciones de agua y las tomas eléctricas se sitúan en zonas que luego quedarán ocultas tras los muebles, permitiendo ahorrar en revestimientos”, cuenta el experto.
Si hablamos de azulejos, un truco que nos recomienda Alejandro es, en las zonas visibles, colocar vinilos o materiales económicos. “Esta solución puede representar un ahorro de entre 1.500 y 2.000 euros solo en alicatado”, asegura.
Relacionado con esto, también podemos alicatar únicamente las zonas necesarias, como la encimera. “Estas requieren más protección contra la humedad e insectos y pintar el resto con materiales resistentes. Es una solución, además de moderna, resulta higiénica y barata”, cuenta el creador de contenido.
El mobiliario
“Cuando no es posible conservar los muebles existentes, conviene elegir opciones económicas pero duraderas. Marcas como IKEA ofrecen alternativas que, sin ser las más baratas, ofrecen buena calidad percibida y durabilidad. Ejemplo de ello son cocinas con más de diez años en uso y sin deterioro”, explica.
Por ejemplo, el inversor ofrece una alternativa a los clásicos muebles de almacenaje superiores: las baldas. “También es conveniente evitar rinconeras y el uso excesivo de cajoneras, que elevan el coste de forma significativa”, aconseja.
En cuanto al diseño, Alejandro explica que es mejor optar por muebles de colores neutros y claros al no estar sujetos a tendencias pasajeras. “Incluso usando muebles económicos, es clave no escatimar en herrajes, bisagras y guías, elementos que determinan la durabilidad. Marcas como Blum ofrecen calidad a bajo coste”, añade.
Precios reales
Con su experiencia, Alejandro desveló en su vídeo diferentes casos de reformas de cocina para simular cuánto costaría cada opción
“Un lavado de cara puede costar entre 600 y 1.200 euros, dependiendo de si se realiza por cuenta propia o con mano de obra contratada”, cuenta. Así, desglosó los precios para una cocina de 7-8 m²
- Esmalte sintético para azulejos: 190 €
- Suelo vinílico autoadhesivo: 125€
- Plafones: 100€
- Protector vinílico para peto: 150€
- Tiradores nuevos: 60€
Para una de 30 m² de alicatado, el precio es superior, alcanzando los 9.000 euros
- Alicatado: 2.000€
- Suelo: 375€
- Electricidad: 800€
- Fontanería: 625€
- Muebles: 1.500 €
“Otras reducciones de costes pueden lograrse eliminando falsos techos, usando encimeras laminadas económicas o pintando en lugar de alicatar”, comenta. “En algunos casos, se puede bajar el presupuesto total a 5.000 euros si se realiza parte del trabajo personalmente”, acaba el especialista.
Fuente: La Vanguardia.
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