Después de varios intentos, Selena Gomez vendió su casa de Los Ángeles
Dos años demoró la actriz y cantante en poder vender su lujosa mansión en Encino Valley. ¡Conocela por dentro!
Sabemos que a veces cuesta, ¡pero Selena Gomez demoró dos años en poder vender su casa de Los Ángeles! Quizás, nunca sabremos las razones de esta demora, pero sí sabemos que logró ponerle precio y encontrar un comprador interesado. La actriz y cantante se deshizo de su propiedad por un valor de 2, 3 millones de dólares.


Si bien este 2020 tuvo que suspender la gira presentación de su último álbum, esto no detuvo sus ansias de vender su lujosa mansión ubicada en Encino, el Valle de San Fernando de Los Ángeles.
Esta propiedad fue protagonista de su proyecto personal durante la cuarentena: Un programa de cocina para la plataforma HBO.
La casa por fuera
Se trata de una casa tipo cabaña de los años 50. La magia de la propiedad es que no es visible desde el exterior, ya que está escondida tras unos densos setos.

Una vez se atraviesa el umbral, aparece la fachada de la propiedad con ladrillo calada y un hermoso porche con columnas.

La zona exterior cuenta con una terraza con suelo de ladrillo. En esta zona se encuentra el comedor exterior, cubierto con una pérgola hecha a medida con tela con un entramado en forma de tablero de ajedrez en tres dimensiones.

Siguiendo el recorrido por el exterior, nos encontramos con una piscina dividida en dos zonas. Por una parte, la zona de agua y, por otra, tipo spa. Esta última está junto al seto, que aporta privacidad al conjunto y evita a los paparazzi.

¡Vamos adentro!
En el interior dominan sobretodo los colores claros y los tonos ocres. En la sala principal una chimenea ocupa todo el salón, con un frontal de mármol verde beteado, que aporta la única nota de color.

Los sofás con tapicerías blancas y la mesa de centro de terciopelo aportan serenidad al conjunto. En un lateral asoma un piano de cola, quizás, un elemento musical muy utilizado por Selena.

La casa tiene un único piso en el que se organizan salón, cocina y comedor totalmente comunicados.

El suelo de barro cocido está presente en toda la casa. Grandes ventanales en el espacio central del comedor y sillas de madera de tonos cálidos encajan perfectamente en el espacio neo rústico.

La cocina tiene una mesa tocinera a modo de isla, con un sobre de mármol tirando a gris. Sobre ella, un estante que cuelga del techo en el que se han colocado ollas de cobre que sirven tanto para cocinar como para decorar.

Esta lujosa propiedad cuenta con dos dormitorios de invitados, que comparten baño, y un dormitorio principal.

En el patio trasero encontramos un pequeño bloque. Se trata de una casa para invitados que cuenta con un dormitorio, un baño y una sala de ejercicios. Además, los invitados tienen acceso directo a la piscina.