Hemos analizado el precio de las propiedades en dólares y esto es lo que encontramos
El escenario actual representa un desafío para el real estate. En esta nota compartimos nuestra mirada sobre la evolución de los precios y de los productos que llamarán la atención durante 2021.
El sector inmobiliario vive el momento más cambiante de los últimos tiempos: el vaivén del dólar, la parálisis provocada por la pandemia por el nuevo coronavirus, la recesión dominante; generan interrogantes sobre el futuro del mercado. Además, el cambio de paradigma en las formas de vivir y los espacios que habitar, hacen su aporte a un rubro destinado a repensar su estrategia para continuar operando de cara a 2021.
El que manda
Sin dudas, el dólar es uno de los factores determinantes si de real estate hablamos. El movimiento acelerado del billete estadounidense afecta la toma de decisiones dentro del sector, pues, para funcionar, necesita estabilidad cambiaria o, al menos, conocer el funcionamiento de dicha moneda en función, por ejemplo, de la inflación.
El dólar no solo mide los valores de las propiedades sino que, además, es el actual medio de pago.
Sus cambios abruptos provocan incertidumbre en los precios pero también en la capacidad de disponer del billete a futuro. Nos encontramos en un contexto en el que el dólar es cada vez más codiciado, entonces, ¿cómo recuperar el billete estadounidense luego de realizar una inversión si, en la actualidad, el cepo restringe la capacidad de disponer de él? Indudablemente, esta situación repercute en las operaciones de compraventa que se realizan. El cepo provoca que la moneda sea cada vez más escasa y comience a valorarse más. Por lo tanto, al intentar retenerla se limita las decisiones de las personas quienes, en vez de movilizar sus ahorros, eligen la liquidez en dólares billete.
Quiénes muestran interés
En la actualidad, quienes apuestan por la compra de propiedades son los consumidores finales. Si bien, los lotes en barrios privados y countries han demostrado ser un producto sobresaliente con respecto al resto, no cabe duda que el deseo de las personas está puesto en adquirir más metros para acomodar su vida y dejar de lado los espacios de encierro que evidenciaron los días de cuarentena.
Los inversores, en cambio, se lanzan solamente cuando encuentran una oportunidad. Caso contrario, optan por tener dólares líquidos antes que inmovilizarlos en una propiedad. Esto deja de manifiesto que el contexto actual refleja pocas certezas en cuanto al futuro de alquileres y reventas.
Además, los modelos con espacio privativo interior deberán esperar para conquistar potenciales interesados, pues, la pandemia provocó un cambio acelerado en los gustos y necesidades inclinándose más por la expansión pero en lugares propio. Las propuestas de espacios comunes, en contacto con otros ambientes perderán terreno en 2021 frente a lugares interiores, privados y con menos riesgos.
El valor de las propiedades
Otro tanto ocurre con los precios, terreno en el que existe un espacio en el que los valores fluyen. Tanto quien compra (o quiere alquilar) como quien vende (o tiene una propiedad para alquilar) conocen dicho espacio en el que los valores no son los mismos que antes. El precio es mucho más ajustado, lo que puede desembocar en que se achiquen los márgenes de contraoferta.
El 2021 se asoma como un año en el que el mercado necesitará personas informadas, las oportunidades de inversión estarán en los locales comerciales pero exigirá un rediseño del modelo de inmueble, es decir, locales y oficinas que sean más flexibles. Para todo aquello que se tenga en mente para el próximo año, será fundamental contar con profesionales del sector inmobiliario con experiencia en el rubro capaces de concretar operaciones exitosas.
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