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Superadobe, la técnica de bajo costo que avanza en Mendoza

Este tipo de proyectos se instalaron en Lavalle y en el pedemonte de Las Heras y Luján de Cuyo.

Con la finalidad de encontrar métodos económicos, naturales y en armonía con el medio ambiente, en Mendoza, se abren paso diferentes sistemas de construcción. Uno de ellos es el conocido como superadobe, que consiste en utilizar sacos de polietileno rellenos de tierra apisonada para levantar estructuras resistentes y sostenibles.

Esta técnica fue desarrollada en los años 80 por el arquitecto iraní Nader Khalili y ha sido utilizada en todo el mundo para construir viviendas, escuelas, centros comunitarios y otros edificios.

En la provincia, el músico y referente de la comunidad huarpe, Marcelino Azaguate, fue uno que adoptó el superadobe quien además destacó que este método comenzó a desarrollarse hace unos seis años y existen proyectos de este tipo en Lavalle y en el pedemonte de Las Heras y Luján de Cuyo.

Su beneficio principal es que es muy económico, ya que no utiliza hierros, ni la proporción de tres por uno de cemento. Además, cualquiera que lo aprenda, puede levantar su casa.

El proceso comienza con la preparación del terreno y la creación de una base sólida y nivelada. Luego se colocan los sacos de polipropileno llenos de tierra, un poco de cemento y algo de agua.

Las mangas se van cortando de diferentes medidas para hacer las paredes y se van alternando unas con otras hasta llegar a la altura del techo y, a diferencia de los métodos tradicionales, no se utilizan columnas de hierro. La obra se concluye con un revoque de barro y cal.

Fuente: Casa Comuna.

En general, el costo de construcción de un domo de superadobe es inferior al de una casa convencional y lo que se deba pagar por la mano de obra dependerá de la ubicación de la iniciativa y de las habilidades requeridas para levantar la propiedad.

Las bolsas se pueden conseguir en Mercado Libre, por ejemplo, a $65.000 las 1.000 unidades, de 40 x 70 centímetros.

Existen beneficios a largo plazo en cuanto al ahorro económico, ya que estas construcciones son térmicas, es decir, frescas en verano y cálidas en invierno.

Aunque para algunos ingenieros la palabra “adobe” tiene una connotación negativa, de hecho, el Centro de Ingenieros de Mendoza no avala estas técnicas, en 2015, la Universidad Nacional de Cuyo impulsó “Piedras en común” en Godoy Cruz, un proyecto de construcción de una vivienda social utilizando técnicas de construcción sustentable y materiales locales, entre los que podría incluirse el superadobe.

Fuente: Urvi.

La iniciativa fue llevada a cabo por la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la UNCuyo en colaboración con otras organizaciones y entidades.

Tenía como objetivo explorar nuevas formas de construcción sostenible y accesible para comunidades desfavorecidas, y proporcionar una vivienda de calidad a un costo razonable.

El “superadobe” de Khalili está aprobado por unas de las legislaciones más estrictas del mundo, en California, Estados Unidos. Sin embargo, en Latinoamérica y, estrictamente, en Mendoza aún hay reticencia, sobre todo de los profesionales que trabajan en los municipios, que son, los que dan o no el visto bueno a las construcciones.

Fuente: Diario El Sol.

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