Propietarios e inquilinos hacen acuerdos por 3 y 6 meses
A la espera por la Ley de alquileres, la incertidumbre sobre cómo saldrán los cambios en el Congreso hizo surgir esta tendencia en Mendoza en aquellos contratos que se extinguieron. Las renovaciones son por plazos cada vez más cortos.
Las idas y vueltas, como la dilatación en el tratamiento de los cambios de la Ley de Alquileres, que hace más de un año se demora en el Congreso Nacional, y la escalada inflacionaria que vive la Argentina representan las peores condiciones para las personas que buscan alquilar una propiedad o que tienen que renovar el contrato.
La incertidumbre sobre cómo serán las nuevas reglas y la escasez de oferta que ya hay en el mercado inmobiliario hicieron surgir una tendencia, que es la prórroga de los acuerdos por tres y hasta seis meses, aguardando lo que defina la cámara de Diputados que trata las modificaciones del Senado.
Aquellos contratos que se vencieron el 30 de septiembre y que tendrían que hacer una renovación, lo que están haciendo es prorrogar por 3 y 6 meses a la espera de la nueva Ley de Alquileres.
Frente a la poca sensibilidad de la gente del Senado que trajo la discusión a este momento electoral y que genera más incertidumbre en el mercado, lo que se está haciendo es constituir prórrogas por pocos meses.
Entre las modificaciones está que se mantenga el plazo mínimo de locación de inmueble de 3 años y el cambio sustancial es la actualización a partir del coeficiente Casa Propia (que es más bajo que el que se está tomando actualmente y que lo elabora el Banco Central) publicado por el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat.
Aquellos alquileres que vencieron y cuyos propietarios los están renovando en un plazo de 36 meses, están pidiendo un 30 y un 40% más de lo que valdría en plaza y están levantando tanto el precio que al inquilino se le hace impagable.
Los inquilinos que están en situación de prórroga o renovación lo están haciendo entre 3 y 6 meses esperando que surja una ley que sea superadora y que les sirva a ambas partes.
Respecto de lo que puede ocurrir de ser aprobados los cambios que introdujo la Cámara Alta y que pueden llegar a repercutir en el índice de actualización, no va a resolver el problema. Porque en un contexto inflacionario donde hay un 120% anual, ningún propietario va a aceptar que se utilice un índice que el año pasado fue del 70% anual y que si fuera semestral sería del 30%.
A la espera de la nueva ley, este es el aumento de octubre
La Ley de Alquileres 27.551 establece el mecanismo de ajuste anual que se rige por el Índice Para Contratos de Locación del Banco Central, se constituye con dos variables clave de la economía: inflación y salarios. Es decir, con el Índice de Precios al Consumidor (INDEC) que mensualmente publica el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), y en cuanto a salarios la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE).
De esta cuenta surge que el coeficiente para la actualización en octubre, para quienes deben renovar este mes. Y es del 115,3%. De esta manera, quienes pagaban una cuota hasta el 30 de septiembre de $50.000 pasa a $107.600 y una propiedad por la que ya se pagaba $100.000 cuesta el doble.
Para aquellos que celebraron contrato en octubre del año pasado, o del ante año para este octubre es del 115,3%; un índice bastante alto. Los salarios de estos inquilinos no crecieron de la misma manera, por eso se da una contradicción y una situación sumamente compleja.
Fuente: Diario Uno.
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