ARQUITECTURA

¿Cómo frenar la pérdida de energía en el hogar?

Para evitarlo, es necesario recurrir a estrategias en el momento de la construcción para lograr un nivel de aislación eficiente.

Se acercan las temperaturas altas y, con ellas, la necesidad de climatizar los espacios del hogar. Si bien, el frío y sus bajas temperaturas, también son periodos de reflexión sobre cómo ambientar una casa, no cabe duda de que, ahora, es buen momento para frenar la pérdida de energía que escapa por los techos, paredes y hasta pisos.

Según se estima, alrededor del 40 % de la energía que se consume en Argentina corresponde a edificios y a viviendas. Y, si sumamos que estas pierden energía por estos los puntos sensibles que ya mencionamos; el tema del derroche de energía se transforma en algo urgente de tratar.

Esto ocurre, básicamente, para lograr un consumo eficiente de la energía, detener la pérdida y, sobre todo, ser más amigables con el ecosistema.

pérdida de energía control
Aprendé a controlar la pérdida de energía del hogar.

Si bien, el mercado habla con frecuencia de electrodomésticos de bajo consumo, aquellos que no superan los 400 kw/h por mes. Sin embargo, poco se habla de las condiciones edilicias y del nivel de aislación térmica eficiente que se necesita para que un inmueble no pierda energía.

Asimismo, tener este conocimiento “lo más aceitado posible”, también será de gran utilidad para adquirir electrodomésticos, ya sea para la climatización del hogar como para otro tipo de usos eficientes.

En este sentido, recordemos que elegir un electrodoméstico también requiere de conocer su proceso de instalación, puesto que, si está mal colocado; también podría generar pérdida de energía.  

De igual modo, el tipo de electrodoméstico eficiente que se adquiera deberá ajustarse a la aislación térmica con la que cuente el hogar.

Puntos sensibles que producen pérdida de energía

Entre los puntos sensibles por los cuales se produce pérdida de energía en el hogar, destacamos tres:

  1. El techo
  2. Las paredes
  3. Los pisos

Sin embargo, existen personas que no dudan en definir a la vivienda como “un gran colador”, puesto que, en arquitectura y construcción, la envolvente de una edificación se asemeja a este utensilio de cocina, especialmente, cuando n está aislada térmicamente.

Esto, sin dudas, provoca un malgasto de consumo energético, sobre todo, a la hora de climatizar los ambientes (frío o calor). De igual modo, limita el confort térmico de sus habitantes.

pérdida de energía ventanas
La energía del hogar puede escaparse de múltiples formas.

Si tenemos que hacer mención a números, el 50 % del consumo de energía en los hogares de la Argentina es por la climatización.

Según el arquitecto Federico García Zúñiga, consultor técnico de Andima, Asociación Nacional de Industrias de Materiales Aislantes: “Actuar sobre la envolvente de un inmueble es una de las medidas más eficientes en edificación para evitar las pérdidas energéticas y reducir el consumo de energía”.

Impacto de la envolvente

El impacto directo que tiene la envolvente sobre el ahorro energético y económico es enorme.

  • Mejorando la envolvente se mantiene el confort térmico en los hogares.
  • Se necesita menos consumo de energía ayudando a no superar los 400Kw/h por mes

Los puntos sensibles de la pérdida de energía

Como bien ya mencionamos estos tres puntos son los techos, las paredes y los pisos.

Detallaremos cada una en particular para conocer en qué consiste esta pérdida de energía y cómo evitarla.

El techo

Para los expertos, el 40 % del calor o frío se escapa por el techo, puesto que es la superficie más expuesta al clima externa, sol, lluvias, viento.

Para evitar que esto ocurra, resulta imprescindible redoblar los esfuerzos a la hora de aislar térmicamente.

Si los techos están fríos o calientes, en el interior será necesario calentar o enfriar con mayor consumo de energía.

pérdida de energía paredes
Los muros son responsables de la pérdida de energía en el hogar.

Los muros

Los muros son los más expuestos de todos, y son responsables del 30 % de la pérdida de calor o frío de un hogar. Por ello, se los debe tomar como la segunda instancia a la hora de realizar tareas de protección ante temperaturas.

Generalmente, no suelen estar aislados térmicamente y, por ello, traspasa al interior la temperatura exterior.

Un claro ejemplo de ello es cuando, por ejemplo, en invierno tocamos las paredes y las notamos muy frías o cuando nos percatamos de condensaciones en las ventanas y paredes.  Se estima que, las carpinterías, son espacios en los cuales se pierde la energía entre un 15 % y 20 %.

El piso

Por su parte, el pisorepresenta el 10 % de pérdidas de frío o calor. A su vez, representa la superficie más próxima al cuerpo, por lo que, aislarlo térmicamente, lo transforma en una zona realmente confortable.

Para finalizar, tenés que saber que, la aislación térmica eficiente, se puede aplicar en todo tipo de construcciones, ya sea que se trata de obras nuevas o en instancias de rehabilitación.

Asimismo, dentro de los materiales de aislación térmica eficiente, hay 3 que resultan los más efectivos y que brindan los mejores resultados: lana de vidrio, poliestireno expandido y poliuretano. 

Con aislación térmica eficiente se logra ahorrar hasta un 35 % en el consumo de energía y hasta un 60 % en las facturas sobre la luz y el gas consumidos para climatizar un hogar.

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